MAYORÍA ABSOLUTA DE GILIPOLLAS

Focus: Política
Fecha: 05/07/2016

Tomo de prestado este fino titular de portada de la revista “el jueves”. No se puede describir mejor el resultado de las elecciones generales en España. El PP ha sido el partido más votado, gracias al apoyo entusiasta de muchos ciudadanos españoles. El PSOE, una mala copia del PP, ha obtenido la segunda plaza.

No ha habido sorpresas, como ya anticipé en mi entrada del pasado 20 de junio (¡Vivan las caenas!). http://www.alfdurancorner.com/articulos/VIVAN-LAS-CAENAS-2.html. No importa la abrumadora carga de despropósitos del bloque españolista, el hedor de sus trapicheos, la manipulación grosera de la información, la utilización del poder judicial como arma represora o el uso de la caja común para temas particulares. Sus votantes comparten este abanico de comportamientos. En la medida de lo posible, ellos harían lo propio. Lo encuentran normal, e incluso razonable.

Y el registro notarial de esa validación se pone de manifiesto cuando repasamos, aunque sea por encima, el expediente judicial del partido más votado. En Madrid hay 72 imputados, en las operaciones Púnica, Bárcenas y Gürtel. Destacan los nombres del señor Granados (número 2 de Esperanza Aguirre), del señor Bárcenas (ex-tesorero), del señor Acebes (ex-ministro) y de los alcaldes González Panero, Ginés López, Jesús Sepúlveda y Guillermo Ortega. El caso Gürtel, que se extiende a otros territorios, afecta a 187 personas. Luego está el tema de los sobresueldos a la cúpula del partido, que sigue en standby.

En la Comunidad Valenciana hay imputados como el ex-presidente de la Generalitat señor Olivas, el ex-consejero señor Blasco, la ex-presidenta de las Corts Valencianas señora Martínez, el ex-presidente de la Diputación señor Fabra y la ex-alcaldesa señora Castedo. El propio Partido Popular está imputado por blanqueo de capitales (caso Imelsa). Hay 115 personas investigadas, incluyendo a la señora Barberá, que es aforada (es decir, protegida). Por el caso Emarsa hay imputadas 25 personas más.

Para no aburrirnos preferimos no proseguir con Murcia, las Canarias, las Baleares, Castilla la Mancha, Castilla y León, Andalucía, Galicia, etc. Prácticamente en cada provincia del Estado cuentan con casos probados de corrupción, muchos de ellos a la espera de sentencias condenatorias, que los tribunales españoles procurarán dulcificar. Todo queda en familia.

Han sabido explotar además la catalanofobia de sus fieles (con la inestimable ayuda de los líderes del PSOE), que seguro se sienten próximos al ministro Fernández, en conchabeo permanente con la magistratura y el aparato fiscal del Estado. En este juego, todo vale. ¡Leña a los independentistas catalanes!

Y en el colmo de la desfachatez, la Mesa de la Diputación permanente del Congreso de Diputados, formada por PP, PSOE y Ciudadanos, ha impedido que el ministro Fernández de explicaciones sobre las grabaciones de sus conversaciones con el señor De Alfonso (conversaciones que en un país civilizado hubieran supuesto la dimisión inmediata de los implicados), como habían pedido Esquerra Republicana, Convergència, Podemos e Izquierda Unida.

Y es que la España del siglo XXI es igual a la España del XIX, con los Borbones de figuras decorativas, una constitución tramposa y un sistema bipartidista, basado en dos partidos cada vez más próximos ideológicamente. En lugar de Cánovas y Sagasta, ahora tenemos a Rajoy y Sánchez, dignos sucesores de Aznar y Rodríguez Zapatero. Y luego, por debajo, el caciquismo de siempre, propio de un país atrasado, en el que se produce un maridaje entre los funcionarios públicos y los poderes fácticos, que permite repartir subvenciones y regalías según convenga, con el viejo propósito de tener “lubricado” el sistema.

Y que conste que a mí me importa un bledo lo que hagan o dejen de hacer. Hace ya mucho tiempo que me di de baja. No he tenido nunca problemas emocionales sobre el desenganche, probablemente porque nunca me he sentido enganchado. (ver mi entrada del 20 de abril del 2015: Sin acritud). http://www.alfdurancorner.com/articulos/SIN-ACRITUD.html

Lo que conviene tener claro, como independentistas catalanes, es que esas elecciones eran para elegir un parlamento y un gobierno español, y que la presencia de nuestros 17 parlamentarios ha de ser puramente testimonial, en calidad de observadores. No hay que perder el tiempo en esa corrala, ni tampoco contar con la sopa de letras de “En Comú Podem”, que ni saben ni contestan y se entretienen haciendo cantos a la “fraternidad universal”, que podría ser el título de una zarzuela posmoderna.

Nosotros a lo nuestro, con pulso firme, sin desfallecer, sabedores que ellos continuarán jugando sucio, pues es su forma natural de ser.

La independencia está más cerca que nunca, si ponemos el coraje necesario. España entrará en una etapa con difíciles equilibrios de poder, con un PP gobernando en minoría, contando con el apoyo puntual de sus socios PSOE y Ciudadanos. Unas terceras elecciones son impensables, porque los acreedores del Estado no lo permitirían. El nuevo gobierno tendrá que concentrar toda su atención en el día a día. Bajará el volumen de su prepotencia.

Y en un entorno mayor, la Unión Europea, tras el Brexit, ha entrado en un proceso de autoliquidación, tal como está conformada hoy. Tensiones de diversa naturaleza (presupuestarias, fiscales, sociales, políticas) complicarán la existencia a unos funcionarios acostumbrados a una vida regalada. Sólo hay que ver las histéricas declaraciones de sus principales representantes.

Se abre pues una ventana estratégica que debemos aprovechar. La oportunidad está ahí. No la echemos a perder en disquisiciones sobre el sexo de los ángeles. Para eso ya tenemos a la CUP...

 

 

Notas:

(1) Tenía razón el maestro: la estupidez humana es infinita. Para muestra, un botón.

(2) La lectura seleccionada: Ajustada al contexto político actual.

(3) Mi biblioteca: Una de las conferencias magistrales de Robert Musil. Cada frase es motivo de reflexión.

(4) De otras webs: La visión positiva de un inversor sobre las bondades del Brexit para la economía del Reino Unido.

Alf Duran Corner

 

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